Tecnología de doble caldera de La Marzocco, que asegura una notable potencia de vapor, manteniendo niveles óptimos de temperatura del suministro.
Las máquinas de café espresso tienen dos funciones principales:

la extracción del espresso y la producción de vapor. Una ingente demanda de potencia de vapor, puede perjudicar la estabilidad térmica de las máquinas con una sola caldera. Por consiguiente, el café puede salir con una extracción excesiva o insuficiente. Para solucionar el problema, la prestigiosa máquina italiana de café La Marzocco las ha equipado con dos calderas separadas: cada una de ellas se ocupa de una de las dos funciones principales, de manera que, incluso cuando están en función las dos al mismo tiempo, no se producen interferencias.

La caldera de café contiene una gran cantidad de agua a la temperatura adecuada, que se mantiene bajo control gracias a un termostato de precisión, que a su vez asegura una variación de temperatura de un café a otro inferior, a ± 1°C. De lo contrario, las máquinas de otras marcas, con una sola caldera, utilizan reguladores de presión menos idóneos (presóstatos), incluso para la regulación del parámetro más importante: la temperatura. Finalmente, entre las máquinas de La Marzocco, las equipadas con sistema PID aseguran una variación de temperatura de un café a otro, inferior nada menos que a ± 0,5°C, un auténtico récord en el sector. Además la caldera de vapor de La Marzocco, al no contener en su interior intercambiadores de calor, resulta mucho más eficiente. Efectivamente, la presión del vapor puede ajustarse a cualquier nivel, según las necesidades, sin perjudicar la temperatura de extracción del café, permitiendo así la preparación de inimitables bebidas a base de leche. Con La Marzocco, el equilibrio térmico es una regla, no una excepción.

Los grupos de suministro de La Marzocco están entre los más pesados en el mercado. Un grupo de cuerpo pesado, gracias a una masa inercial superior asegura un equilibrio térmico más estable, y por consiguiente una temperatura del agua en la salida del café, constante en todo momento.
Otra característica de los grupos de La Marzocco, es que éstos están fundidos en acero inoxidable y soldados directamente en la caldera, también realizada en acero inoxidable, predispuesta exclusivamente para suministrar agua caliente para la salida de café y cuya temperatura es controlada por un termostato.

El sistema es comúnmente llamado “tecnología de grupos saturados”, puesto que el agua de la caldera y el agua que se encuentra dentro del grupo de suministro forman un solo bloque, obteniendo un resultado de temperatura de extracción y suministro constante, café tras café.
Por otra parte, los tubos de vapor omnidireccionales de acero inoxidable de La Marzocco ofrecen al barista una mayor flexibilidad de uso. El tubo de vapor de las máquinas puede desplazarse en cualquier dirección, adaptándose a las necesidades del operador, facilitando el trabajo, maximizando la actividad del barista en la preparación de bebidas con leche.

Adquirir una de las máquinas La Marzocco tiene un enorme valor añadido, pues tendrá a disposición una organización internacional cuyo objetivo principal es ofrecer el mejor servicio de asistencia técnica. Es motivo de orgullo para la empresa italiana, tener la capacidad de satisfacer al cliente y responder al menor tiempo sus necesidades.
Un aspecto importante para la diferenciación de cada local, es que La Marzocco permite personalizar cada una de las máquinas incluyendo accesorios especiales.
La Marzocco nunca se echa atrás, continuando su camino de constante investigación y desarrollo de nuevos productos, métodos y soluciones. Por ello la prensión, producto de las necesidades de los clientes, ha sido durante los más de ochenta años de actividad de La Marzocco una de las claves del éxito, y usted puede ser merecedor de una de ellas.